Me ha parecido que este libro se merece una review
en mi blog, y la razón es bien sencilla, se ha cargado mi bloqueo lector. Una
vez más se lo tengo que agradecer a mi hermana por recomendármelo, otra de esas
lectoras extreme que llegaba a leerse un libro al día. Era una de esas novelas
de las que había oído hablar durante toda mi vida, y ahora precisamente me
pregunto dónde se había metido todos estos años porque me ha encantado.
Podríamos decir que esta obra pertenece al género histórico, pero dado que se
desarrolla hace entre 35.000-25.000 años (periodo cálido de 10.000 años durante
la glaciación Wurm) yo diría que más bien pertenece al género prehistórico. Es
por esto que me parece una de las novelas más originales que he leído en mucho
tiempo, ya que se trata de una época de la que no se conservan fuentes más allá
de restos arqueológicos, indicios y enterramientos. Así que por eso me ha
sorprendido tanto que la escritora haya conseguido crear una historia que te va
atrapando poco a poco, en los tiempos en que el mundo era compartido por dos
especies humanas, los Neandertales y los primeros Homo Sapiens (Cro-Magnones).
Es por esto que nos encontramos con Ayla, una joven
que pierde a su familia a causa de un violento terremoto y que es encontrada y
adoptada por un clan de Neandertales. Ya os podéis imaginar el choque cultural
que eso representa en dos especies que a pesar de ser parecidas son tan
diferentes. Son tiempos en lo que se comienza a notar el declive poblacional de
los Neandertales respecto a los primitivos Sapiens, en una época con
condiciones climáticas cambiantes. Cuando la curandera del clan, Iza, adopta a
la joven sapiens se produce su bautismo como una protegida del Oso Cavernario o
el Gran Ursus por el hechicero, el Mog-ur Creb. A pesar del impacto para el
resto de miembros del clan por su aspecto tan extraño, Ayla irá siendo aceptada
poco a poco ya que incluso la mayoría considera que la niña les trae buena
suerte y el favor de los espíritus. La joven irá desarrollando un interés y una
serie de habilidades que la harán vivir todo tipo de aventuras, y que en muchas
ocasiones la llevarán a ser mal vista por algunos.
Con el tiempo terminas por encariñarte con Ayla y el
resto de miembros del Clan, ya que ahí la autora hace un ejercicio de
creatividad maravilloso para describirte la cultura Neandertal, combinando el
conocimiento arqueológico, las teorías sobre como sentían o pensaban, y un poco
de imaginación. Reconozco que cuando empecé a leerlo había momentos en que
creía que no lo terminaría, incluso llegué a pensar en empezar otro libro, pero
poco a poco me fue enganchando y a la vez también iba mejorando mi
concentración, ya que venía de una época de mucho bloqueo. Así que cuando lo
terminé decidí que continuaría con el resto de la Saga Hijos de la Tierra, que
se compone de otros cinco libros:
-El Clan del Oso Cavernario (1980)
-El Valle de
los Caballos (1982)
-Los
Cazadores de Mamuts (1985)
-Las Llanuras
del Tránsito (1990)
-Los Refugios
de Piedra (2002)
-La Tierra de
las Cuevas Pintadas (2011)
Son unos cuantos y son algo gordos, así que posiblemente
los compraré en formato ebook, porque lo de leer y hacer pesas ya no se me da
tan bien. Hoy en día salen unos tochos que alucinas, preciosos de ver en las
estanterías, pero no tanto cuando lees recostado. No obstante sé que esta saga
de libros merece la pena y más con un final, que sin hacer ningún destripe, me
pareció algo agridulce. Así que me quedé con ganas de continuar. A mi ritmo
lector a lo mejor tardo un par de años, porque siempre me gusta variar de un
libro a otro, pero no sería la primera vez que me zampo una saga de libros. Una
de las cosas a favor de esta novela, es que también encierra un misterio que
aún hoy en día sigue siendo motivo de debate en la comunidad científica. No se
sabe por qué razón una especie con una capacidad craneana superior a la de los
humanos modernos, mayor robustez y una mejor resistencia al frio se extinguió.
Hoy en día va ganando peso la teoría que argumenta que neandertales y sapiens
se combinaron, ya que se sabe que estas especies se liaban entre sí, pero mucho
más de lo que nos podamos imaginar. Yo os recomiendo que le deis una
oportunidad a esta novela de aventuras, donde viviremos parte de la vida de
Ayla, incluso si no queréis continuar el resto de la saga, leéroslo.